
Es profesor en la Universidad de California, Santa Barbara. Su investigación se centra en la economía política del medio ambiente, en específico cambio climático y deforestación en América Latina. Su trabajo reciente se enfoca en los impactos de las industrias extractivas en comunidades locales, el manejo de recursos de uso común y la política de la transición energética. Tiene un doctorado en Ciencia Política por la Universidad de California, Los Ángeles, una maestría en política internacional por la Universidad de Stanford y una licenciatura en Relaciones Internacionales por El Colegio de México. Desempeñó una estancia como Investigador Postdoctoral en la Escuela de Medio Ambiente de la Universidad de Yale y trabajó en el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático de México.